Desde hace años, el área de frutas y verduras de un establecimiento comercial es de las más propensas al uso de plásticos. ¿Es necesario un envase de plástico para envolver una o dos piezas de fruta? Pero el abuso de plásticos va más allá, pues seguro que te has fijado en esas etiquetas de plástico adheridas en muchas de las frutas y verduras.
¿Esto es necesario? Rotundamente no, y es otra vía añadida de contaminación medioambiental. En este post queremos hablarte del impacto negativo de las pegatinas de plástico de frutas y verduras, cuál es su función y nos preguntaremos si hay alternativa sostenible.
Para qué sirven las pegatinas de plástico de frutas y verduras
A veces es posible encontrar fruta o verdura no envasada. Por fin podemos prescindir del plástico y comprar a granel, pensaremos. Sin embargo, parece que alguien consideró que, al no estar embalada, era indispensable pegar una etiqueta de plástico en cada pieza con información acerca de la variedad de la fruta o verdura en cuestión y su origen.
La función de las pegatinas de plástico de frutas y verduras, por tanto, es la de suministrar esta información al consumidor. No en vano, la legislación europea en materia de etiquetado de los productos alimenticios exige que cada pieza de fruta o verdura indique su lugar de procedencia y producción. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), no obstante, recuerda que es suficiente con que dicha información figure en carteles visibles para el público en el punto de venta.
Por lo visto, estas pegatinas de plástico están reguladas bajo la denominación de “aditivo alimentario indirecto”. Esto significa que deben superar determinadas pruebas para verificar que no hay riesgo para el consumidor en el caso de ser ingeridas. En cualquier caso, los stickers no son biodegradables y, además, suponen un gasto innecesario de recursos. En definitiva, son elementos plásticos que hacen un flaco favor al medioambiente como veremos a continuación.
Reciclar las etiquetas de plástico de frutas y verduras: por qué es misión imposible
Podríamos pensar que la pegatina de la manzana que nos comemos es diminuta como para ocasionar un grave perjuicio y que, en último término, podemos reciclarla. No obstante, la realidad es que los plásticos pequeños son tan contaminantes precisamente por la dificultad de reciclarse. Estos suponen el 10% del total y, por su formato, acaban perdiéndose durante el proceso del reciclaje.
En las instalaciones para el tratamiento de residuos los artículos pequeños (entre 4 y 7 cm) son desechados, dado que dificultan el proceso de selección. Estos, finalmente, son enviados a incinerar o bien al vertedero.
En conclusión, que los plásticos de pequeño tamaño reciban el tratamiento adecuado es inviable, por lo que acaban diseminados por nuestro entorno.
Etiquetar la fruta y verdura con láser, la alternativa sostenible
Si algo hemos aprendido en nuestro intento de apostar por una vida sin residuos ni plásticos es que siempre hay una alternativa. En este caso, nos viene de una empresa española denominada Laser Food cuya propuesta es sustituir las pegatinas de plástico de las frutas y verduras por un nuevo etiquetado con láser.
Laser Food se fundó en el año 2006 con la visión de convertir la tecnología en un referente en el marcado de los productos agroalimentarios a nivel mundial. Desde su punto de vista (y desde el nuestro) es una absoluta incongruencia invertir en la producción ecológica de frutas y verduras para, posteriormente, etiquetarlas con plásticos.
Se ha demostrado que el uso del láser por el etiquetado ha reducido la huella de carbono en un 99% en relación con el etiquetado tradicional. Se trata de un sistema de marcado cero plásticos, sin pegamentos, tintas, colorantes o embalajes. Es, por tanto, respetuoso con el medioambiente y con el entorno que nos rodea.
¿En qué consiste esta técnica exactamente? En el empleo de un láser que despigmenta la capa más externa de la piel del producto para obtener una marca visible, pero sin adición de colorantes. Además, es un tipo de marcado que no afecta a la vida útil del producto ni compromete su calidad.
Ya hay fecha para el fin del envasado de frutas y verduras
Los envases de plástico de frutas y verduras tienen los días contados. Será a partir de 2023 cuando quede prohibida esta mala práctica. No obstante, esta medida solo se aplicará a los sets de fruta que pesen menos de 1,5 kg. Tampoco se hará extensible a aquellos productos que pudieran deteriorarse sin un embalaje.
Con esta normativa se busca promover la venta de productos a granel, animando a los usuarios a que lleven consigo sus propias bolsas reutilizables. De nada sirve esta futura ley si continuamos usando bolsas de plástico indiscriminadamente.
En el catálogo de Cero Residuo encontrarás un amplio surtido de bolsas reutilizables de todos los tamaños y materiales. Eso sí, todas ellas 100% sostenibles y biodegradables. Echa un vistazo a la selección de bolsas de algodón orgánico para comprar el pan, bolsas grandes de malla de algodón orgánico para frutas y verduras, bolsas de malla de asa larga y un largo etcétera. ¡Te esperamos en nuestra tienda online!