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Jabones sólidos

Es curioso cómo hay cosas que van y vuelven continuamente. Es el caso de los jabones sólidos, productos de higiene que siempre hemos visto en casa de nuestras abuelas. No hace tanto tiempo, en los hogares, la moda del plástico se hacía de rogar y resultaba mucho más sencillo lavarse las manos, la cara o el cuerpo con una pastilla de jabón. En esos momentos no había conciencia medioambiental pero primaba la utilidad. Y es que sí, los jabones sólidos vuelven no solo porque son menos contaminantes que los geles líquidos, sino porque son realmente mucho más prácticos. ¿Sabes por qué?

Antes de que el plástico acaparara todos los ámbitos de nuestra vida, las pastillas de jabón se encargaban de cubrir todas nuestras necesidades de higiene. No hacía falta llenar la casa de envases plastificados llenos de químicos. En su lugar, apenas hacían falta tres ingredientes para tener entre nuestras manos un producto duradero y eficaz: aceite de oliva, sosa cáustica y agua. Fácil, ¿no? Eran tiempos en los que no hacía faltar mencionar que el jabón no contenía parabenos ni otras sustancias químicas.

El regreso de los jabones sólidos

Cuando algo es realmente bueno, por fortuna, siempre acaba volviendo. Los jabones sólidos son un ejemplo de ello. Como acabamos de ver, antiguamente la receta era bastante básica. Por eso, quizás fueron apartados del mercado e imponiéndose los geles líquidos. Estos contenían, además de agentes limpiadores, otros activos más específicos con propiedades nutritivas, antibacterianas y un largo etcétera. Al mismo tiempo, ofrecían la capacidad de generar mucha más espuma, algo que el ciudadano de a pie siempre ha asociado con una higiene más efectiva y profunda, aunque no tenga nada que ver. Por supuesto, la presencia de todos estos beneficios estaba ligada a un mayor contenido de químicos dudosos.

Hoy en día, las tradicionales pastillas de jabón se han adaptado a las nuevas exigencias de los consumidores y, sin perder su esencia, contienen propiedades extra para que no eches de menos los geles líquidos.

Jabones sólidos de alepo

Ventajas de los jabones sólidos que te gustará conocer

Para averiguar por qué deberías volver a usar jabones sólidos, no queda otra que probarlos. ¡Y no tienes que irte muy lejos! Hoy en día cada vez hay más jabones sólidos hechos con ingredientes naturales que puedes encontrar en varios sitios. En nuestra tienda tenemos diferentes variedades para cada necesidad.

Mientras tanto, te dejamos una lista de las ventajas de reincorporarlos a tu rutina de belleza e higiene.

Los jabones sólidos ocupan poco espacio

Las pastillas de jabón se presentan libres de envases de plástico. De ahí que una de sus principales ventajas sea que apenas ocupan espacio. Quizás en el día a día en casa no te importe pero cuando salgas de viaje lo vas a agradecer. Se acabó pensar en las restricciones en cuanto a líquidos de los aviones pues, sencillamente, con los jabones sólidos no te van a afectar.

Jabones sólidos ecológicos

Los jabones sólidos se elaboran con ingredientes naturales

Tanto si tienes la piel sensible como si, simplemente, te preocupa exponerla a químicos dañinos, te encantará saber que los jabones sólidos solo contienen ingredientes naturales, la mayoría ecológicos, en su fórmula, al menos los de Cero Residuo. Entre nuestras propuestas encontrarás componentes tan inspiradores como la caléndula, la lavanda, la canela con café, la naranja, o el romero. También encuentras jabones más específicos como el jabón de afeitar, que crea abundante espuma para que la cuchilla deslice mejor, el jabón de Alepo con propiedades calmantes y reparadoras o cualquiera de nuestros jabones faciales. Lo mejor es que cada uno de ellos está vinculado a ciertas propiedades.

Los jabones sólidos duran más

Los jabones sólidos suelen venir en presentaciones de alrededor de 100 g. Anteriormente hablamos del poco espacio que ocupan, pero ¿qué te parecería si te dijéramos que este formato, además, cunde mucho más que cualquier gel líquido? Una sola pastilla de estas dimensiones puede servir para un centenar de duchas, por lo que al final su precio acaba compensando.

jabón sólido natural y bolsa de sisal

Los jabones sólidos son biodegradables

Cuando un jabón sólido se acaba, no queda ningún residuo, por lo que si la idea del movimiento Zero Waste te seduce, es una buena manera de iniciarte en él. Al estar elaborados solo con ingredientes naturales son biodegradables, por lo que son 100 % respetuosos con el medio ambiente. ¿Puedes imaginar cuántos millones y millones de botellas de gel dejarían de acabar en la basura al año si todos nos pasásemos a los jabones sólidos?

Avatar de Cero Residuo

Cero Residuo

Cero Residuo es una tienda online de productos Zero Waste o productos que no generan residuos. Son productos reutilizables o biodegradables que substituyen a los productos de usar y tirar para minimizar el impacto de nuestra huella ambiental.

Comentarios (5)

  1. Avatar de
    • Sara

    • 18 octubre, 2021 en 22:03 pm

    Hola! Cual seria el más recomendable en caso de embarazo?
    Gracias!!!

    1. Avatar de
      • Cero Residuo

      • 20 octubre, 2021 en 13:39 pm

      Hola! Los jabones sólidos que recomendamos en caso de embarazo están todos en la categoría Crianza>Embarazo. Normalmente son aquellos que no contienen aceites esenciales 🙂 puedes verlos aquí: https://www.ceroresiduo.com/categoria-producto/crianza/embarazo/

      Un saludo!

  2. Avatar de
    • Adriana

    • 6 abril, 2020 en 09:08 am

    Mi hijo tiene piel atópica y me cuesta encontrar un jabón que le vaya bien, ¿cual me recomiendas!

    1. Avatar de
      • Cero Residuo

      • 6 abril, 2020 en 12:47 pm

      Hola Adriana, probablemente el mejor para piel atópica es el Jabón de Alepo, ideal para pieles sensibles y delicadas

  3. Avatar de
    • Luisa Blasc.

    • 9 marzo, 2020 en 19:58 pm

    He probado unos cuantos jabones y son fantásticos piel suave y agradable fragancia.
    Otro uso que les doy, en vez de guardarlos en un cajón, los pongo donde guardo la ropa blanca.
    Probarlo! Veréis que bien huelen vuestras sábanas y toallas!

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